Pymes y grandes empresas tienen su particular pugna en la red para copar las primeras posiciones en los resultados de búsqueda. Una buena estrategia SEO es el primer paso para estar más cerca del objetivo.
La presencia de cualquier empresa en Internet parece imprescindible en la era digital. Frases como “hay que estar” o “si no estás no existes” fueron algunas de las más escuchadas hace dos décadas, cuando la red estaba solo al alcance de los sectores profesionales y las empresas publicaban sus primeras páginas web.
Sin embargo, el conocimiento más maduro de Internet por parte de pymes y empresas confirmó que “estar” no era equivalente a “existir”, ni tampoco sinónimo de ventas o reputación a través de la red. Lo importante, una vez teníamos un rincón para nuestra pyme o empresa en el World Wide Web, era estar visible para nuestro público objetivo. ¿Cómo? Logrando la mejor posición posible en los motores de búsqueda, siendo Google el paradigma del posicionamiento.
En la actualidad, las pymes son conscientes de la importancia de contar con una página web bien posicionada, y para lograrlo es esencial elaborar un plan de marketing, y dentro del mismo, trazar una estrategia de SEO (Search Engine Monitoring) adecuada para escalar posiciones. ¿Cuáles son las claves para mejorar nuestra visibilidad en la red? ¿Hay una fórmula exacta? Ciertamente solo Google o los principales buscadores conocen si hay una receta perfecta.
Los cambios del popular algoritmo de Google iniciados en febrero de 2011, con el lanzamiento de una gran actualización bajo el nombre de Google Panda, dieron inicio a una nueva era del posicionamiento que resituó los criterios que el buscador de Mountain View tenía para ordenar los resultados de búsqueda. Hoy en día, se estima que hay centenares de criterios que organizan esos resultados, de los cuales podemos desgranar algunas de las claves que ayudarán a que nuestra página web tenga más posibilidades de llegar al target indicado.
Los cambios del popular algoritmo de Google quieren premiar el buen contenido y ese fue el objetivo del famoso Panda.
Es por ello que las pymes deben incluir en su estrategia online la generación de artículos en su web o blog, con buena frecuencia de actualización y con la mayor profundidad posible para posicionar el conjunto de su página y las palabras clave que más le interesan.
El conocido ‘Content is King’ ha tomado en los últimos años más fuerza que nunca.
Otro de los factores importantes y que más cambios ha sufrido en los últimos años es el perfil de enlaces y cómo son valorador por los buscadores.
La primera gran actualización vino de la mano de Google Penguin, lanzada por primera vez en abril de 2012, que penalizó las prácticas artificiales de SEO relacionadas con el linkbuilding.
Para Google, la generación de enlaces entrantes o salientes de una página web tiene que ser natural, dirigiendo los vínculos a fuentes internas o externas de interés y relacionadas con nuestro contenido.
La mejora del rendimiento o WPO (Web Performace Optimization) en un apartado más técnico, pero no menos importante, y se centra en reducir los tiempos de carga y el tamaño de las páginas, pensando especialmente en un ecosistema en el que los móviles cada vez son mas importantes.
El factor principal que mide Google en este sentido es la velocidad de carga de la página, es decir, el tiempo que dista desde que introducimos la web de nuestra pyme en el buscador e iniciamos la búsqueda hasta que la página se ha cargado con todos sus elementos.
La optimización del rendimiento afectará directamente a otros parámetros que Google también valora, como la tasa de rebote (cuando un usuario entra y sale al momento de nuestra web) o la permanencia del usuario en la página.
La conjunción de muchos de los criterios que el buscador tiene en cuenta también se verán reflejados en los índices de reputación de nuestro dominio y página.
Para conocerlo, contamos con herramientas interesantes como la Mozbar, que podemos tener siempre visible en nuestro navegador para conocer la autoridad de dominio y página.
Antigüedad del dominio, calidad de contenido, enlaces entrantes o acciones en redes sociales son algunos de los indicadores importantes para mejorar nuestros índices de reputación.
Una buena estrategia SEO requiere la intervención de profesionales del posicionamiento que, de forma interna o externa, puedan orientar a las pymes sobre las acciones más importantes a realizar partiendo de los objetivos de la compañía (posicionarse para ventas, reputación online, etc.).
La importancia del SEO ha abierto la puerta a empresas especializadas en posicionamiento web que son un gran apoyo para trabajar la estrategia de pymes en la red, destinando menos recursos internos y contando con el conocimiento necesario para un SEO Plan adecuado.
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