Joaquín Molina Balsalobre, kinomakino, Security Advisor en Verne Group, nos da las claves sobre ciberseguridad y nos cuenta que “la industria de cibercrimen ha venido para quedarse. Los malos siempre inventan nuevas fórmulas para  hacer sus fechorías”

Porque a una persona sentada a miles de kilómetros de ti, se le ocurren muchas fórmulas para robarnos datos, para sustraer información personal susceptible y acceder a nuestra información más sensible, o bien, para entrar en la bases de datos de nuestra empresa y, es entonces, cuando  ya no podemos hacer nada.

No llegar a esta situación in extremis es lo que nos propone kinomakino,  “en nuestras empresas y para evitar cualquier tipo de ataque de ciberseguridad es fundamental empezar por hacer una auditoria  y saber en qué situación nos encontramos; después hay que elaborar el plan director que nos marca las líneas estratégicas y, por último, hay que definir los pasos que vamos a dar para poner en marcha esas barreras que nos defiendan de un ciberataque”.

Vivimos en un mundo en el que con dinero lo solucionamos todo, sin embargo, el problema radica en que hay ciberataques en los que se cifra toda la información de la empresa y es entonces cuando los hackers piden un rescate y tenemos un grave problema.

O bien se produce una filtración de datos y salen publicados los datos de tus clientes o las fórmulas de tu empresa y pensamos que es un problema informático, cuando en realidad es un problema de negocio

Para evitar estos ataques, tiene que haber cultura de ciberseguridad.

Durante 2020, según el FBI, se produjo un aumento del 225% en las pérdidas producidas por el ransomware y se  ha calculado que una empresa es atacada cada 11 segundos.

El daño provocado por este tipo de ataques a nivel global podría llegar durante 2021 a los USD 20 mil millones.

Por otra parte, el Fondo Económico Mundial compara la ciberseguridad con una pérdida de biodiversidad, en términos de gravedad. La ciberseguridad ya es un problema equiparable a los grandes problemas de la humanidad.

Según el Security Advisor de Verne Tech, “a nuestra compañía nos llegan todas las semanas dos o tres empresas que han hecho una transferencia de dinero indebida porque los hackers han suplantado identidades o han sido ciberatacadas”.  Partimos de la base que encabezamos el ranking de países europeos con más número de sanciones en pirateo de licencias informáticas que instalamos en nuestros ordenadores. No cumplimos con la norma y eso que es de obligado cumplimiento, y es ahí donde hay que cambiar esa cultura de ciberseguridad.

La ciberseguridad la tenemos que mantener en todos los dispositivos, desde los teléfonos, los coches conectados, ordenadores, etc.

Las principales amenazas a las que nos podemos enfrentar son:

• Hackers informáticos.
• Minería de datos: hackear bitcoin tiene un impacto económico importante.
• Desinformación o información falsa: bulos en internet o campañas de desprestigio sobre nuestra empresa.
• Email phising o el timo del CEO: donde suplantan identidades y roban contraseñas de nuestro cliente, proveedor, etc.

Los especialistas en ciberseguridad llevan años indicando que la Inteligencia Artificial se va a usar para el mal, para causar daño y ya está pasando. El impacto del ransomware es que no puedas trabajar en tu ordenador durante un tiempo.

Al final, la mayoría de los incidentes de seguridad se producen porque el ciberataque entra por el protocolo de escritorio remoto o por el phising. Y hay que tener en cuenta cómo entramos de remoto a los escritorios virtuales.

Se produce una alta vulnerabilidad en nuestro software cuando no actualizamos, los piratas nos hackean y estos se introducen en los equipos de la empresa.

Todas la empresas, de todos los tamaños y de todos los sectores están siendo atacadas. Es una situación que se produce en todo tipo de empresas, por malas prácticas de uso de la informática.

Las soluciones las tienen que aportar las empresas. La ciberseguridad es un proceso constante de mejora: lo que hoy solucionamos, mañana el ciberatacante lo mejora. Tenemos que procurar que lo ofensivo se salte al defensivo. Poner diferentes niveles para que si los malos se saltan el primero no puedan llegar al siguiente. Y así de forma sucesiva con una política constante de mejora.

Hay que construir una cultura de ciberseguridad. La mayoría de los incidentes están relacionados con el phising.

Las soluciones técnicas pasan además por incrementar la formación de los empleados con herramientas que les permita distinguir cuando un mail es bueno o malo. Entrenarlos de forma ordenada para identificar cuando están suplantando identidades.

La ciberseguridad es una cuestión de empresa. Personas, procesos y tecnología… a las personas hay que formarlas y tenemos que regular cómo hacemos los procesos. Hay que tener diferentes medidas según los niveles de seguridad que necesitamos tener.

En las empresas es fundamental mantener la coherencia y recibir un servicio, consultoría y una formación en ciberseguridad y, con eso, ya estamos creciendo en seguridad.

Si, el Cloud es seguro. El cloud es resiliente, sin embargo, la responsabilidad de la ciberseguridad es siempre nuestra.

Y tenemos que ofrecer todas las garantías de seguridad. Con el Cloud tenemos otra responsabilidad que requiere de una serie de acciones y en todo momento hemos de ser responsables. Tenemos que tener medidas antiphising, un antispam, campañas de concienciación que mejoren un poco más al usuario informático que todos llevamos dentro y utilizar así mejor el sentido común que es el menos común de todos los sentidos.

Aquí podrás visionar la sesión completa del webinar que celebramos el 4 de noviembre con Joaquín Molina, Kinomakino, Security Advisor en Verne Group.